Tienes un piso en alquiler, y sabes desde hace tiempo que necesita “unos arreglillos”. Sin embargo, literalmente, no encuentras el momento. Bien sea porque el piso está ocupado, bien porque necesitabas echar cuentas, o por otros motivos que no vienen al caso, todavía no te has puesto a ello. Y ahora que por fin se han alineado los astros del bricouniverso, toca ponerse en situación y decidir ¿cuándo es el mejor momento para hacer una reforma? ¿realmente es importante tener en cuenta la época del año?

Y es que, todo dependerá del tipo de reforma que vayas a emprender. Si consideras que el piso no está mal, y que con un buen toque de home staging parecerá otro, sin entrar a mayores, pues no hace falta que mires el calendario. Estas técnicas de marketing decorativo apuestan por sacar a relucir todo el potencial de la vivienda, sin recurrir a OBRAS, en mayúsculas. Como mucho, pintar las paredes. Todo lo demás se centrará en realzar visualmente el piso, en busca de amplitud, calidez y la eliminación de esos elementos antiestéticos que se acumulan con el paso de los años sin que nadie sepa cómo han llegado a parar ahí. En este caso, si te preguntas cuál es el mes más apropiado para llamar a los pintores, pues a partir de mayo, cuando haya pasado la temporada de lluvias, los días largos y cálidos favorecen el secado de la pintura, y se pueden dejar las ventanas abiertas, para facilitar la ventilación de las estancias.
En cambio, si vas a emplearte a fondo en la renovación del piso, pues quieres aumentar su valor en el mercado del alquiler o de venta, entonces sí, conviene echar mano de la agenda. En este sentido, te recomendamos qué reformas puedes acometer, atendiendo a las estaciones del año.
Reformas de una vivienda en inverno
En invierno, ya sabes que los días son cortos, y tanto el frío como la humedad hacen continuo acto de presencia. Esto implica que, por ejemplo, es buen momento para detectar y tratar humedades, goteras, grietas.., También es idóneo para realizar trabajos de interior (instalaciones eléctricas, carpintería, alicatados) y, especialmente, para conocer la luz real que tiene la vivienda. De este modo, podrás trabajar sobre el terreno la iluminación, algo especialmente difícil en verano. Si la reforma requiere trabajos de albañilería o fontanería, mejor dejarlo para otra ocasión. Las temperaturas bajas pueden afectar al rendimiento de los materiales (cemento), e incluso imposibilitar totalmente el trabajo, como podría ser, por ejemplo, la congelación en las tuberías.

Reformas de un piso en verano
En verano, hay muchas horas de luz, y la jornada laboral podría extenderse, siempre y cuando el calor extremo lo permita. Por ello, no conviene tener a los albañiles al sol, pero sí es probable que sea el periodo ideal de coger las riendas de la reforma, aprovechando que los inquilinos han dejado el piso por vacaciones, y tú también tienes tiempo libre para avanzar a buen ritmo. Julio puede ser el mes ideal para hacer reformas de tabiquería interior, renovar el mobiliario (aprovechando las rebajas), revisar a fondo el aire acondicionado, o quitar el dichoso gotelé, por ejemplo. En definitiva, prácticamente todas las reparaciones que se puedan hacer bajo techo. Lo ideal sería poder adelantar estos trabajos al mes de junio, con el fin de evitar que los posibles retrasos extiendan la obra más allá de la temporada estival. Para ello, te recomendamos que cuentes con el apoyo de un buen profesional de house flipping, quien te aconsejará cómo afrontar este proyecto con diligencia y garantías de éxito.

Reformas para llevar a cabo en primavera y otoño
La primavera y el otoño se perfilan sin duda como la época ideal para hacer reformas, de la índole y duración que sea necesaria. Las suaves temperaturas, y un cierto margen respecto a la llegada de cualquier periodo vacacional de los que hacen pararse el mundo (véase Navidades, o agosto en Madrid) favorecen la contratación de los servicios de reformas, así como la oferta de materiales en stock. Si no dispones de tiempo para supervisar los avances de las obras, o sencillamente apuestas por el consejo de los especialistas en la renovación efectiva, más conocida como house flipping, juega bien tus cartas, y apuesta por primavera y otoño para poner a punto esa vivienda que pide a gritos un cambio.
Preguntas frecuentes sobre reformas concretas
Si tengo que poner un toldo ¿cuándo es mejor hacerlo? En mayo comienza la temporada alta de toldos. Ten en cuenta que todos quieren tener sombra en verano, y que abril es un mes lluvioso. Por tanto, si quieres hacer las delicias de tus inquilinos cuando el sol apriete, adelántate a la jugada, pide presupuesto en febrero o marzo, y cierra la fecha de instalación para los primeros días de mayo. Así no fallarás. Lo mismo cuando hablamos del aire acondicionado.
Solo estoy pensando en forrar los armarios ¿hay un mes ideal para eso? Pues no hay nada escrito sobre eso, por lo que, siéntete libre de hacerlo cuando lo desees. Lo más complicado será ponerte de acuerdo con tu inquilino, en el caso de que la vivienda ya la tengas alquilada. Aun así, agradecerá enormemente disponer de armarios nuevos.
La casa tiene jardín ¿cuándo tengo que prepararlo? Tienes desde finales de otoño y todo el invierno para los trabajos de poda y arreglos varios en setos y arbolado. Si lo que quieres es plantar flores, espera a la primavera, puesto que el frío no las dejará crecer.
¿Tienes ya claro qué es lo que necesitas reformar en tu piso de alquiler? ¿Te queda alguna duda sobre cuál es el momento ideal para hacerlo? ¿Sabes que puedes conseguir ayudas para financiarlas? Si necesitas asesoramiento profesional sobre cuándo y cómo, aquí estamos para atenderte.
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